Sí, lo sabemos. A todos nos han contado ese cuento cuando éramos adolescentes: «Si te masturbas demasiado, ¡te vas a quedar ciego!». Pero ahora que somos adultos y más (o menos) sabios, es hora de preguntarnos: ¿La masturbación realmente tiene consecuencias negativas? O, mejor dicho, ¿deberíamos preocuparnos por algo más que quedarnos sin vista? Un placer tenerlos de nuevo en Varón Viril.
Vamos a despejar mitos y verdades sobre este tema con un enfoque cercano, sin tapujos y con un poco de humor.
1. La vieja leyenda del «te quedarás ciego»
Empecemos por la clásica advertencia que todos escuchamos en algún momento. No, no te vas a quedar ciego, ni te van a salir pelos en las palmas de las manos (aunque, imagina si eso fuera verdad). Estos mitos surgieron hace mucho tiempo, cuando la sociedad consideraba la masturbación como algo inmoral o dañino. Así que tranquilo, tus ojos seguirán sanos, al menos si sigues lavándote las manos después.
2. ¿Es mala para la salud?
Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. Los expertos coinciden en que, en la mayoría de los casos, la masturbación no es perjudicial para la salud. De hecho, tiene algunos beneficios inesperados: puede reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y, bueno, es una forma de conocerte mejor. Pero claro, como todo en la vida, ¡la moderación es clave!
Si te encuentras cancelando reuniones de trabajo o rechazando salir con amigos porque tienes «planes en solitario», puede que sea momento de reconsiderar la frecuencia. Al igual que comer chocolate o ver series en Netflix, demasiado de algo bueno puede terminar siendo… bueno, no tan bueno.
3. ¿Afecta mi vida sexual?
Algunas personas creen que la masturbación frecuente podría hacer que el sexo en pareja pierda su encanto. ¡Sorpresa! No necesariamente. Si lo haces con normalidad y sin excesos, puede ser un complemento perfecto para una vida sexual saludable. Pero, si prefieres una noche a solas en lugar de pasar tiempo con tu pareja, podría ser una señal de que algo anda mal en tu relación o en cómo percibes el sexo.
Además, el porno puede ser un factor importante aquí. Si estás acostumbrado a los estímulos exagerados de la industria pornográfica, puede que el sexo real no cumpla con esas expectativas irreales. Así que, ¡cuidado con esas comparaciones!
4. El mito de la energía perdida
¿Alguna vez has escuchado que la masturbación te deja «sin energía» o que podrías estar perdiendo nutrientes importantes? Aunque suena como una excusa creativa para saltarse el gimnasio, la realidad es que no hay evidencia científica sólida que respalde esto. Puede que te sientas un poco relajado después, pero eso no significa que hayas perdido todas tus vitaminas. Puedes seguir con tu vida normal, así que no culpes a la masturbación si te sientes perezoso.
5. ¿Puede volverse una adicción?
Ahora, la parte seria. Aunque para la mayoría de las personas la masturbación es una actividad completamente normal, hay quienes pueden desarrollar una relación poco saludable con ella. Si sientes que está interfiriendo con tu trabajo, tus relaciones o tu vida diaria, podrías estar ante un problema. Y como con cualquier otra adicción, es importante buscar ayuda si es necesario.
Conclusión: No te vas a quedar ciego, pero todo con moderación
En resumen: la masturbación, en sí misma, no tiene consecuencias negativas graves si se hace con moderación. Es natural, común y, en muchos casos, saludable. Así que la próxima vez que escuches un mito absurdo, recuerda que la ciencia está de tu lado (¡y tus ojos también!). Pero, como con todo en la vida, si sientes que algo está fuera de control, es buena idea tomarse un descanso y reflexionar.
Ahora que ya tienes la verdad incómoda sobre la masturbación, puedes dejar de preocuparte por quedarte ciego… y comenzar a preocuparte por cosas más importantes, como cuántos memes has visto hoy en la cuenta de Varón Viril de X.